A077-21


Auto 077/21

 

CONFLICTO NEGATIVO DE COMPETENCIA-Factor territorial/FACTOR TERRITORIAL-Competencia a prevención del lugar donde ocurrió la violación o donde tiene efectos

 

CONFLICTO DE COMPETENCIA EN TUTELA-Se remite el expediente al despacho judicial que en primer lugar conoció el asunto

 

 

Referencia: Expediente ICC-3942

 

Conflicto de competencia suscitado entre el Juzgado Tercero Penal Municipal con Funciones de Control de Garantías de Bucaramanga y el Juzgado Tercero Promiscuo Municipal con Funciones de Conocimiento de San Juan de Girón (Santander)

 

Magistrado sustanciador:

ANTONIO JOSÉ LIZARAZO OCAMPO

 

 

Bogotá D. C., veinticinco (25) de febrero de dos mil veintiuno (2021)

 

 

La Sala Plena de la Corte Constitucional, en cumplimiento de sus atribuciones constitucionales y de los requisitos y trámites establecidos en el Decreto 2591 de 1991, profiere el siguiente

                                                                                 

AUTO

 

I.                  ANTECEDENTES

 

1.                 Jefrey Alonso Padilla Correa, presentó acción de tutela contra Serviclínicos Dromédica. Consideró que dicha entidad vulneró sus derechos fundamentales a la salud y la seguridad social, entre otros, al negar la autorización de terapias domiciliarias prescritas por su médico tratante, bajo el argumento, según el cual dicho servicio no se encuentra cubierto por el SOAT.

 

2.                 Mediante auto de 10 de diciembre de 2020, el Juzgado Tercero Penal Municipal con Funciones de Control de Garantías de Bucaramanga resolvió remitir el expediente a los Juzgados Promiscuos Municipales de San Juan de Girón (Santander). Ello, en razón a que el demandante reside en este municipio y es allí donde se producen los efectos de la alegada vulneración. Por tanto, afirmó que, según lo dispuesto en el artículo 2.2.3.1.2.1 del Decreto 1983 de 2017, su despacho carece de competencia para conocer el asunto, dado que, en la ciudad de Bucaramanga, no ocurre ninguna afectación.

 

3.                 Una vez recibido el asunto, el Juzgado Tercero Promiscuo Municipal con Funciones de Conocimiento de San Juan de Girón (Santander), mediante auto del 10 de diciembre de 2020, resolvió: (i) no aceptar la competencia para conocer de la acción de tutela; (ii) plantear el conflicto negativo de competencia y; (iii) ordenar la remisión del asunto a los jueces del circuito de Bucaramanga, para que se dirimiera la colisión. Esto, al considerar que, si bien el accionante reside en el municipio de Girón, lo cierto es que la entidad demandada se encuentra domiciliada en Bucaramanga y, por tanto, es allí donde se origina la vulneración.

 

Así, sostuvo que el competente para conocer la solicitud de amparo no es solo el juez del lugar donde se producen los efectos, sino también aquel del sitio en el que se origina la vulneración. Sin embargo, se debe tener en cuenta que el actor eligió el segundo escenario para instaurar la acción constitucional, razón por la cual, es el juez de Bucaramanga el que debe asumir el conocimiento del asunto.

 

4.  Por su parte, el Juzgado Primero Civil del Circuito de Bucaramanga, mediante auto del 15 de diciembre de 2020, resolvió remitir el asunto a la Corte Constitucional, para que, como máximo órgano de la jurisdicción constitucional resolviera el conflicto planteado. Esto, al estimar que el superior jerárquico del Juzgado Tercero Penal Municipal con Función de Control de Garantías es el Juzgado Penal del Circuito de Bucaramanga y no su despacho.

 

II.              CONSIDERACIONES

 

5. Competencia residual de la Corte Constitucional para resolver el conflicto. La Corte Constitucional ha reiterado que, por regla general, la resolución de los conflictos de competencia en materia de tutela corresponde a las autoridades judiciales previstas por la Ley 270 de 1996 – Ley Estatutaria de Administración de Justicia (en adelante, LEAJ)[1]. Asimismo, esta Corte ha explicado que su competencia para resolver conflictos de competencia solo se activa cuando: (i) la referida Ley no prevé una autoridad encargada de resolverlos[2] o (ii) a la luz de los principios de celeridad y eficacia, este Tribunal deba pronunciarse para garantizar a los ciudadanos acceso oportuno a la administración de justicia[3]. El presente asunto debería ser resuelto por la Sala Mixta del Tribunal Superior de Bucaramanga, de conformidad con lo previsto en el artículo 16 de la LEAJ[4]. Sin embargo, para evitar que se dilate, aún más, la decisión de fondo, la Sala Plena de esta corporación asumirá su estudio, sin perjuicio de la advertencia que se hará al Juzgado Tercero Promiscuo Municipal con Funciones de Conocimiento de San Juan de Girón (Santander).

 

6. Factores de competencia en relación con acciones de tutela. La Corte reitera que, de conformidad con los artículos 86 de la Constitución Política y 8 del título transitorio del Acto Legislativo 1 de 2017, así como 32 y 37 del Decreto 2591 de 1991, existen tres factores de competencia en materia de tutela, a saber: (i) el factor territorial[5], (ii) el factor subjetivo[6] y (iii) el factor funcional[7]. En particular, a la luz del factor territorial, los jueces competentes para conocer y tramitar una acción de tutela son aquellos con jurisdicción en el lugar donde (a) ocurre la presunta amenaza o la vulneración de los derechos fundamentales o (b) se producen los efectos de los actos que, según el accionante, generan la referida amenaza o vulneración[8]. Al respecto, esta Corte ha sostenido que, cuando se presente una divergencia entre autoridades judiciales competentes en virtud del factor territorial, se debe otorgar prevalencia a la elección del demandante, “en virtud del criterio a prevención”[9], previsto por el artículo 37 del Decreto 2591 de 1991. Esto, por cuanto “existe un interés del ordenamiento jurídico en proteger la libertad del actor frente a la posibilidad de elegir el juez competente de las acciones de tutela que desee promover”[10].

 

III.           CASO CONCRETO

 

7. En el caso sub examine se configuró un conflicto negativo de competencia. La Sala Plena advierte que, en el caso sub judice, se configuró un conflicto negativo de competencia originado en las diferentes interpretaciones del factor territorial por parte de las autoridades judiciales involucradas. Al respecto, esta Corte considera que el Juzgado Tercero Penal Municipal con Funciones de Control de Garantías de Bucaramanga y el Juzgado Tercero Promiscuo Municipal con Funciones de Conocimiento de San Juan de Girón (Santander) son competentes para conocer de la acción de tutela, en virtud del factor territorial. El primero, por cuanto el domicilio de la accionada es en Bucaramanga y es en esa ciudad donde se origina la presunta afectación o amenaza de los derechos fundamentales, ya que es el lugar en donde presuntamente se negó la prestación del servicio. El segundo, porque el municipio de San Juan de Girón es lugar en el que reside el actor y en donde se producirían los efectos de la vulneración invocada, pues la afectación de su salud se daría allí. Ante esta situación, corresponde: (i) aplicar el artículo 37 del Decreto 2591 de 1991 y, por la competencia a prevención propia de la acción de tutela, (ii) respetar la elección de la accionante.

 

8. La acción de tutela debe ser resuelta por el Juzgado Tercero Penal Municipal con Funciones de Control de Garantías de Bucaramanga. Esto, porque, pese a que ambas autoridades judiciales son competentes para tramitar la acción de tutela, debe respetarse la elección del accionante, en virtud de la competencia a prevención. En consecuencia, la Sala Plena dejará sin efectos el auto proferido el 10 de diciembre de 2020 por el Juzgado Tercero Penal Municipal con Funciones de Control de Garantías de Bucaramanga. Además, ordenará que se remita el expediente a dicha autoridad judicial para que, de forma inmediata, inicie el trámite y profiera decisión de fondo respecto del amparo solicitado, conforme al artículo 86 de la Constitución Política y el Decreto 2591 de 1991.

 

IV.           DECISIÓN

 

Con base en las anteriores consideraciones, la Sala Plena de la Corte Constitucional,

 

 

RESUELVE:

 

Primero.- DEJAR SIN EFECTOS el auto del 10 de noviembre de 2020, proferido por el Juzgado Tercero Penal Municipal con Funciones de Control de Garantías de Bucaramanga, en el marco de la acción de tutela promovida por Jefrey Alonso Padilla Correa contra Serviclínicos Dromédica.

 

Segundo.- REMITIR el expediente ICC-3942 al Juzgado Tercero Penal Municipal con Funciones de Control de Garantías de Bucaramanga, para que profiera decisión de fondo respecto de la referida acción de tutela.

 

Tercero.- ADVERTIR al Juzgado Tercero Promiscuo Municipal con Funciones de Conocimiento de San Juan de Girón (Santander) que los conflictos de competencia en materia de tutela deben ser resueltos, en principio, por las autoridades judiciales establecidas en la Ley 270 de 1996, para lo cual debe observar las reglas previstas sobre la materia en la jurisprudencia de la Corte Constitucional, expuestas en el presente auto y compiladas en el auto 550 de 2018.

 

Cuarto.- Por Secretaría General, COMUNICAR al actor y al Juzgado Tercero Promiscuo Municipal con Funciones de Conocimiento de San Juan de Girón (Santander) la decisión adoptada mediante esta providencia.

 

Notifíquese, comuníquese y cúmplase,

 

 

 

ANTONIO JOSÉ LIZARAZO OCAMPO

Presidente

 

 

 

DIANA FAJARDO RIVERA

Magistrada

 

 

 

JORGE ENRIQUE IBAÑEZ NAJAR

Magistrado

 

 

 

ALEJANDRO LINARES CANTILLO

Magistrado

 

 

 

PAOLA ANDREA MENESES MOSQUERA

Magistrada

 

 

 

GLORIA STELLA ORTIZ DELGADO

Magistrada

 

 

 

CRISTINA PARDO SCHLESINGER

Magistrada

 

 

 

JOSÉ FERNANDO REYES CUARTAS

Magistrado

 

 

 

ALBERTO ROJAS RÍOS

Magistrado

 

 

 

MARTHA VICTORIA SÁCHICA MÉNDEZ

Secretaria General

 

 



[1] Auto A-550 de 2018. Sobre el particular, la Corte Constitucional ha reiterado que la autoridad judicial encargada de dirimir los conflictos de competencia suscitados dentro de los procesos de tutela debe determinarse de conformidad con lo previsto por los artículos 17, 18, 37 y 41 de la LEAJ.

[2] Autos A-003 de 2018, A-050 de 2018, A-158 de 2018 y A-262 de 2018, entre otros.

[3] Artículo 3 del Decreto 2591 de 1991. Autos A-243 de 2012 y A-495 de 2017, entre otros.

[4] Artículo 16 de la LEAJ: “Las Salas de Casación Civil y Agraria Laboral y Penal, actuarán según su especialidad como Tribunal de Casación, pudiendo seleccionar las sentencias objeto de su pronunciamiento, para los fines de unificación de la jurisprudencia, protección de los derechos constitucionales y control de legalidad de los fallos. También conocerán de los conflictos de competencia que, en el ámbito de sus especialidades, se susciten entre las Salas de un mismo tribunal, o entre Tribunales, o entre estos y juzgados de otro distrito, o entre juzgados de diferentes distritos”.

[5] Auto A-550 de 2018. En virtud del factor territorial, los jueces con jurisdicción en el lugar donde ocurre la vulneración o la amenaza que motiva la presentación de la solicitud o donde se producen sus efectos, son competentes para conocer, “a prevención”, del trámite de las acciones de tutela.

[6] Auto A-550 de 2018. Con fundamento en el factor subjetivo, corresponde: (i) a los jueces del circuito, el conocimiento de las acciones de tutela interpuestas en contra de los medios de comunicación y (ii) al Tribunal para la Paz, tramitar las acciones de tutela presentadas en contra de las autoridades de la Jurisdicción Especial para la Paz.

[7] Auto A-550 de 2018. El factor funcional “debe ser verificado por las autoridades judiciales al momento de asumir el conocimiento de una impugnación a una sentencia de tutela, lo cual implica, que únicamente podrán conocer del asunto, las autoridades judiciales que ostentan la condición de superior jerárquico correspondiente, en los términos establecidos en la jurisprudencia”.

[8] Auto A-053 de 2018.

[9] Auto A-018 de 2019. En este sentido, esta Corte ha “interpretado que existe un interés del Legislador estatutario en proteger la libertad del actor en relación con la posibilidad de elegir el juez para resolver la acción de tutela que desea promover, dentro de aquellos que sean competentes”. Autos A-053 de 2018, A-068 de 2018 y A-010 de 2020, entre otros.

[10] Autos A-277 de 2002 y A-074 de 2016.